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domingo, 20 de enero de 2008

Sicilia: cárcel para el gobernador por pasar secretos a mafiosos

Salvatore "Totó" Cuffaro, discutido presidente del gobierno de Sicilia, "patria" de Cosa Nostra, fue condenado ayer a cinco años de cárcel y a la interdicción para ejercitar cargos públicos por el mismo período, por revelar secretos a "padrinos", pero zafó de las acusaciones de ser un cómplice de la mafia.

"La justicia me ha absuelto de las acusaciones de mafioso y por eso no voy a renunciar", dijo Cuffaro, quien anunció que apelará la sentencia.

La interdicción que lo obligaría a alejarse de su cargo oficial sólo entrará en vigor si "Totó" pierde las apelaciones ante la justicia y le confirman la sentencia de condena.

El gobernador deberá responder pronto a un segundo proceso en el que también es acusado de complicidad con "padrinos" de la Cosa Nostra.

Había mucha ansiedad política por conocer la sentencia en el proceso iniciado hace casi tres años, que se desarrolló en 150 audiencias en las que se escucharon los testimonios de más de 200 testigos de los fiscales que sostenían la acusación y la defensa de Cuffaro.

Cuffaro es vicesecretario nacional del partido centrista UDR, liderado por Pier Ferdinando Casini, que gobernó cinco años como aliado del ex primer ministro conservador Silvio Berlusconi.

Berlusconi expresó ayer su solidaridad con "Totó" y reiteró que existe una persecución de "algunos magistrados" contra dirigentes políticos.

Cuffaro fue condenado por revelar secretos con encubrimiento personal y la utilización de secretos de oficio que poseía como presidente del gobierno de Sicilia. Los fiscales sostuvieron que esas actividades las realizó "Totó" en beneficio de representantes de la mafia.

El gobernador Cuffaro avisó a un suboficial de los carabineros, Antonio Borzacchelli, elegido después diputado regional, que investigadores del arma de carabineros habían colocado microespías en la habitación del "capo" mafioso Giuseppe Guttadauro.

El "padrino" era frecuentado por el médico Doménico Miceli, condenado en diciembre de 2006 a ocho años de cárcel por complicidad con la mafia.

Los magistrados que llevaron adelante el proceso siciliano acusaron al presidente del gobierno de Sicilia de haber también avisado a su amigo Miceli que los carabineros y la policía habían colocado microespías en casa del "capo" Guttadauro y del propio Miceli.

Los magistrados de la fiscalía de Palermo que llevaron adelante el proceso se dividieron al estimar la gravedad de las acciones del gobernador de la región. La mayoría consideró que Cuffaro era culpable de las revelaciones de secretos pero no de haber actuado en complicidad con la mafia.

En el mismo proceso, algunos amigos del presidente siciliano recibieron duras condenas. Michelle Aiello, llamado "el rey Midas" de la sanidad siciliana, propietario de una cadena de sanatorios, recibió una sentencia de 14 años de prisión.

Giorgio Riolo, suboficial de carabineros, fue condenado a 4 años y 6 meses de prisión. Otra media docena de allegados al presidente Cuffaro recibieron también sentencias de cárcel, en varios casos por complicidad con la mafia.

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