EMPRESARIOS SICILIANOS CONTRA IMPUESTO MAFIOSO

La asociación de empresarios sicilianos, en una medida sin precedentes tomada por unanimidad, decidió expulsar de la Confederación de Industrias (Cofindustria) a los miembros que pagan el impuesto mafioso, "pizzo".
La cúpula empresarial siciliana, que recibió múltiples intimidaciones, invocó también la intervención del Ejército contra el crimen organizado.
La Confindustria regional, reunida en la ciudad siciliana de Caltanisseta, luego de las amenazas recibidas por algunos de sus dirigentes, aprobó una norma por la cual los empresarios que no se rebelan al "racket" de las extorsiones y pagan el "pizzo", o colaboran de algún modo con la mafia, serán expulsados de la institución.
Andrea Vecchio, presidente de la Asociación de empresarios de la construcción de Catania, impulsó la medida tras haber recibido cuatro amenazas de muerte en cuatro días por no pagar el impuesto mafioso.
Las obras en ejecución de Vecchio fueron atacadas en dos ocasiones en ese período.
Vecchio vive con su familia bajo protección policial pero se niega a ceder a Cosa Nostra.
El jefe del gobierno italiano, Romano Prodi, aplaudió el ejemplo cívico de la Confindustria siciliana, y sostuvo que la lucha contra la delincuencia organizada sólo podrá ganarse con una reacción de la sociedad.
Prodi rechazó la idea propuesta por la Confindustria de desplegar las fuerzas armadas en la isla y consideró que es mejor una reacción civil.
El presidente de la Confindustria, Luca Cordero di Montezemolo, preocupado por la situación en Sicilia, llamó por teléfono al ministro del Interior, Giuliano Amato, quien respondió que el ejecutivo sigue la situación con la máxima atención y luego comentó que la iniciativa es "muy valiente".